Cayó una de las tres hojas del trébol que puede hacer que este Barça haga historia.
El partido poca historia tuvo, el Barça tardó un poco en arrancar, 20 minutos más o menos, y a partir de ahí fue un ciclón de fútbol y ocasiones ante el que el Athletic, que tantas esperanzas tenía puestas en este título, nada pudo hacer.
El partido empezó con polémica, ya que ambas aficiones (la mayoría de ellas) cuando salió al palco presidencial el Rey, y sonó el himno nacional, se pusieron a pitar, por lo que con casi 50.000 almas pitando, se oían más los pitidos que el propio himno, y aquí no entro, pero creo que aunque no se sienta uno español, se ha de tener respeto por los que sí. La polémica la alimentó también el hecho de que TVE (cadena que emitía el partido) no retransmitió en directo la parte del himno, sino que lo hizo en el descanso y eliminando los pitos, una censura en toda regla. Esto a hecho que RTVE despida inmediatamente a su director de deportes, Julián Reyes, que en mi opnión no es más que un cabeza de turco, pero bueno, no se puede saber con certeza.
Una vez pasada la polémica comenzó el partido; el Atheltic salió hipermotivado, corriendo a todos los balones y luchando lo indecible, tanto es así que se adelantó en el marcador a los 10 minutos de juego, por medio de Toquero. Pero claro enfrente está, a mi juicio, el mejor equipo del momento, y eso se nota, una vez el Barça empezó a carburar, fue algo imparable. El dominio inicial y entrega de los bilbaínos terminó en cuanto el Barça quiso controlar la pelota, allá por el 20´, hasta ese momento el Barça no fue lo que nos tiene acostumbrados; pero ya digo una vez se puso fue un monólogo sobre el campo. Touré empató a falta de 10 minutos para terminar la primera parte con una jugada excepcional, mezlcando regate, calidad y buen disparo; la celebración con corte de mangas a la afición del Athletic empañó un poco el buen gol que fue.
La segunda parte fue más de los mismo, desde el primcipio el Barça monopolizó el juego de tal forma que el Athletic ni la olía, solo lo hacía con tímidos "patadones" que poco resultado dieron. Así transcurrió el segundo periodo, con el Barça praticando el futbol de toque y maravilloso al que nos tiene acostumbrados, con Messi y Xavi como principales figuras, y un Athletic impotente ante tal derroche de buen fútbol. El equipo culé se adelantó por medio de Messi y puso el 1-2, y más tarde Bojan en una gran jugada personal al contraataque, y Xavi de falta directa (muy bien ejecutada) pusieron la guinda a una actuación sobresaliente, para variar.
Este Barça parece no tener límites, y es que ha hecho que aficionados neutrales (ni Barça ni Madrid) como yo, quieran y disfruten viendole jugar al futbol, y es que señores/as la propuesta futbolística de este equipo tiene mucho mérito por los tiempos que corren, es de agradecer y para disfrutarlo. El arquitecto de todo es Guardiola, que no hace falta que diga nada sabiendo como fue su etapa de jugador, un auténtico cerebro pensante sobre el campo.
Los culés ya tienen uno de los tres títulos posibles, y si esto sigue así harán historia y con letras de oro. Y es que ¡qué bien juega este equipo!
¡Saludos desde el silencio!
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